En Buenas Compañías

Extracto del Libro de Don R

El sábado por la mañana en Carral,  lo dedicaba Don R a hacer todo tipo de pendientes relacionados con sus negocios de Corestes Pereyra y ya al filo de la 1.00pm terminaba y pasaba a una panadería a comprar una dotación de pan blanco recién horneado , porque había que comer con pan recién hecho , calientito, “que cosa” decía Don Remigio, cuando se refería al pan o a una mujer guapa; ya en su casa y disponiendo a comer,  sonó el teléfono y contesto uno de sus hijos,  Papa,  que es el padre Servando,   Don R puso cara de interrogación, pero igual le contesto,    buenas tardes, sus ordenes Padre,    Don R disculpe que lo moleste a estas horas, pero tengo entendido que usted los lunes en la mañana se va a Corestes, y yo ahorita tengo el mueble(carro) tirado, asi que le quería pedir el favor de que me llevara a Corestes, pues el miércoles son las fiestas de la virgen del Rosario y tenemos que preparar esas festividades,   Con todo gusto Padre, sirve que nos acompañamos mutuamente, vengase a la casa el lunes a las 11.00am y de aquí partimos.,   colgó Don R y dijo “ el Eterno nos acompañara mas de cerca”.

El lunes a las 10.50 estaba el padre tocando el timbre de la casa y Doña Ch le abrió la puerta,  Buenos días Padre Servando,     Buenos días Doña Ch, aquí dando molestias,   al contrario padre que bueno que los acompaña, así irán mas cuidados y mas protegidos por nuestro Señor,   que se cumpla su santa voluntad,   respondió el padre,    Va a la celebración de las fiestas de la Virgen Padre le pregunto Doña Ch     así es, no podemos pasar por alto esos días, hay que honrarla como se merece y que nuestra gente muestre su devoción y haga sus peticiones por la interjección de la virgen,  contesto el padre,    una de mis hijas nació ese día y le puse ese nombre en honor a ella,  dijo Doña Chen eso,   salió Don R y sin mas preámbulo le dio los bueno días y dijo vámonos para que no se nos haga tarde , acompáñeme usted adelante padre, Don Alfredo y mi hijo se van atrás,     acomodaron con cuidado la maleta del padre en la cajuela del carro sabiendo sus santos contenidos y se despidieron de Doña Ch que, como siempre, les echo la bendición, quien no ocultaba su sonrisa por la sobreprotección que llevarían en este viaje.

Ya estamos montados y ensillados, vamonos padre,   y diciendo esto Don R se persigno y piso el acelerador para poner en movimiento el carro, y el padre contesto,   el Señor nos guié en nuestro camino.

Para ir de Carral a Corestes había la ruta corta y la ruta larga; la ruta corta era por la famosa carretera Panamericana,  hasta un caserío llamado los” Charcos”, unos 50 kilómetros,  ahí se cortaba hacia el oeste por un camino de terracería que Don R había construido hasta llegar a Corestes, y la vía larga era por la misma carretera pasando por Los Charcos hasta llegar a un pueblo llamado “ Villa Ocampo”  ahí se tomaba hacia el norte el camino de terracería hasta llegar igualmente a Corestes,  por cualquiera de las rutas el viaje no era muy largo y tomaba como una hora y media o dos horas, claro si no había inconvenientes en el camino. 

Esta carretera panamericana va desde Juarez, Chih, pasando por Carral, Durango, etc, hasta llegar a Ocotal, Chiapas. en la frontera sur de México, y esta en operación desde 1950.

El padre que tenia conversación fácil, rápidamente le comenzó a sacar platica a Don R,      que lastima que Doña Ch no nos pudiera acompañar, le hubieran gustado las celebraciones a la virgen y la oportunidad de tener mas indulgencias plenarias para ella y para toda La familia,      Hay que cuidar al resto de la familia que se quedo,  y no creo que ella necesite mas indulgencias, a la mejor a nosotros una que otra mas no nos cae mal, le contesto don R.

No lo distraigo con la platica,  pregunto el padre,   para nada y además me mantiene alerta y despierto y siempre es bueno tener alguien con quien platicar y mas si tiene influencias en las alturas, contesto Don Rojala así fuera Don R, soy simplemente un instrumento del Señor que hace lo que puede por su rebaño,      hablando de rebaños, padre, mire en aquella ladera, ahí van unos cuantos cabritos, ahorita no son muchos porque no es época de nacimientos, pero deje que llegue la primavera y la paridera y vera como aumentan considerablemente y entonces nos comeremos una fritada a todo meter, que el Señor nos de licencia y estomago para ese tiempo, dijo el padre.

Todavía esta medio verde el campo, este año fuimos bendecidos con agua a tiempo para la siembra, comento el padre,   si desde mediados de abril empezaron a caer las primeras lluvias que hicieron que la semilla prendiera bien y rápido y ya no hubo heladas tardías como el año pasado, asi que este año se aplica el dicho “ agua en abril, mazorcas de a mil” porque el año pasado nos toco el de “ agua en mayo, ni para un caballo”, y nos fue “de la”  ,  pero este año comeremos “ buñuelos con manteca” y podremos darle algo de aguinaldo a la gente,  contesto Don R,        a propósito de eso, dijo el padre, usted hace muy buena labor cada año con la repartición de juguetes y ropa a todos esos hermanos nuestros que no son tan afortunados, hasta los niños esperan ese día por las piñatas que rompen y las bolsitas de dulces que se llevan,  el Señor le va a recompensar algún día esas alegrías que les da a estos niños que no tienen ni perro que les ladre, mas bien puros perros que los muerden,   ya nos ha tocado pasar por esos caminos y veredas   muchos años atrás, asi que ahora que podemos, porque no devolver algo de lo que hemos recibido, además no vamos a hacernos ni mas pobres nimas ricos, dijo Don R.

Casi llegando al caserío de los Charcos el padre comento,    veo que no es aficionado a la velocidad, como otras personas,       mas vale paso que dure, que trote que canse, y además no traemos ninguna urgencia para andar “como alma que lleva el diablo”  comento Don R     ni invoquemos su nombre,  replico el padreasi vamos muy tranquilos,   ¿ nos vamos a irpor el camino que usted construyo?      Si,  ahorita esta bueno el camino, ya pasaron las aguas, y anda gente dándole una arregladita, sirve que los checamos a ver que avance tienen, aparte, la vez pasada nos fuimos Por Villa Ocampo, así que ahora hay que variarle para confundir al enemigo, verdad, Don Alfredo,  comento Don R,     asi es, no hay que hacerle confianza, uno nunca sabe,    contesto Don Alfredo, que siempre iva atento a los detalles del camino y con las herramientas(armas) a la mano.

Como había comentado Don R, el camino estaba en buen estado, así que la travesía fue tranquila y rápida, se detuvieron unos minutos a checar a la gente que andaba reparando el camino y a darles algunas indicaciones, continuaron el viaje y llegaron al rió (Florido) y como no era época de lluvias, pasaron sin problemas, atravesaron toda la zona maizera aledaña al rió y llegaron a Corestes,  al llegar a la casa bajaron el equipage, Don Alfredo se fue para su casa y   Don R le dijo al padre, ya es tarde y hace hambre,  acompañenos a comer aunque sea un lonche,   con todo gusto, contesto el padre,     Don R saco una canasta con lonches que había preparado Doña CH y los puso en la mesa y saco una botella de vino(Marqués del Riscal), la abrió y le sirvió al padre, a un vaso le puso la mitad de agua y la mitad de vino y se lo paso a su hijo y por ultimo se sirvió el,     en eso el padre dijo, permítame bendecir estos alimentos,    “Señor bendice estos alimentos que vamos a comer y nunca permitas que falte el pan en nuestra mesa,  amen” se persigno y dijo, ahora si, a darle,    probo el vino, lo saboreo y comento, “ pues no esta consagrado como el que yo tomo todos los días al oficiar la misa , pero sabe mejor,    “ será por el hambre” padre, contesto medio riéndose Don R, yo ya tengo tiempo tomando de este vino y me cae bien, claro, con medida por supuesto y también les doy a mis hijos para que se vayan enseñando a beber y no caigan en los excesos que siempre son malos.

Usted es de familia grande, conociendo a Doña Ch y a Usted, ninguno de sus hijos ha sentido la vocación de Servir al Señor, pregunto el padre,     pues hasta ahorita ninguno se ha inclinado por eso ,  a este en la escuela las monjas le han insistido, pero yo no veo que que le guste, aunque su mama estaría muy contenta con eso,  tu que dices hijo,  pregunto Don R   por lo pronto, así seguimos,  contesto su hijo,    así síguele y en su momento si el Señor así lo quiere te llamara a su servicio, mientas sigue viendo una que otra muchachita,  dijo el padre, siguió la platica,  terminaron de comer y el padre se despidió y los invito a asistir a las celebraciones que empezaban esa tarde,    por ahí iremos padre, comento don R,  no faltaba mas, mientras vamos a darle un rato al trabajo que la semana apenas esta empezando.

Continuará..